Depósito de lluvia de fango. Rionero, Italia |
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Lluvia de fango En algunas erupciones volcánicas se producen lluvias de fango generadas a partir de procesos convectivos en los que las cenizas emitidas actúan como núcleos de condensación. Gruesas y pesadas gotas de lluvia pueden dejar la huella de su impacto al caer sobre los depósitos fangosos formados por las cenizas húmedas. Las lluvias de fango causan importantes daños en los lugares sobre los que se depositan, sobre todo por hundimientos de techos y tejados, y rotura de ramas de árboles, entre otros.
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Detalle del depósito de lluvia de fango, intercalado entre depósitos de piroclastos de caída y de flujo. |
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Fotografías: Elena González Cárdenas