"...Forma una loma muy extensa, la cual está constituida por dos eminencias: una, la más alta, que es la denominada Palos, y otra al Suroeste de ésta y que no tiene nombre determinado. La forma de la colada es redondeada, tanto por el Norte como por el Sur y zonas del Este. Solo hacia el Oeste se destaca del gran escudo eruptivo una pequeña colada, que avanza hasta casi las márgenes del Guadiana, en las cercanías del caserío de Los Corrales."

Volcán de la Fuente del Arzollar (38º-57'-22" N / 3º-59'-10" W). Se trata de un edificio volcánico formado por un cono de piroclastos de caída y por cortas y potentes coladas cuya potencia en los afloramientos de las canteras donde se explotan masivamente los materiales volcánicos supera los 20 m. Se caracterizan estas coladas por la formación de grandes bolos y groseras columnas prismáticas. Al oeste de este edificio volcánico se abre un cráter generado en una erupción freatomagmática que emitió oleadas piroclásticas direccionales, forzadas por la presencia de una alta ladera cuarcítica que oriento los flujos piroclásticos hacia el actual cauce del arroyo de Las Ánimas. Las oleadas emitidas tienen en un primer momento un marcado carácter seco con formas de fondo sand wave que pasan lateralmente a  planares para posteriormente emplazarse oleadas piroclásticas húmedas, masivas y muy litificadas que forman amplios canales de perfil en U sobre los depósitos previos de oleadas secas y de cenizas. En el conjunto del depósito es frecuente la presencia de fracturación por  asiento y de conductos de desgasificación. Esporádicamente se observa la presencia de lapilli acrecional.

Volcán de la Cabeza del Palo (38º-59'-40" / 3º-58'-26"). El volcán de la Cabeza del Palo se sitúa al Suroeste de Ciudad Real, en la amplia llanada que se extiende entre la capital y el río Guadiana.  Está constituido por un cono de piroclastos, levantado en una erupción estromboliana, en la que se emiten coladas que se dirigen hacia el NW, S y SE,  llegando, en un recorrido de aproximadamente 5 kilómetros, hasta las inmediaciones del emplazamiento de Ciudad Real. Hacia el este y sureste, se localizan amplias depresiones explosivas denominadas Hoya del Palo ( 39º 00' 03" N /  3º-58' 00" W) y Hoya de Casa de Miracielos (39º-00'-03" N / 3º-57'-30" W), posteriores a las erupciones de Cabeza del Palo, cuyos depósitos de oleadas basales  fosilizan sus coladas. 

Volcán de Los Corrales (38º-59'-05" N / 3º-58'-40" W) Se sitúa al SW de Cabeza del Palo, alineado con él en una fisura eruptiva de alrededor de 6 kilómetros de longitud. Se genera en erupciones estrombolianas en las que se emiten coladas que se derraman en todas direcciones, pero principalmente hacia el Guadiana, siguiendo el cauce de un pequeño arroyo, rellenando el cráter hidromagmático intramioceno de Sancho Rey. Estos dos volcanes se ubican en un campo eruptivo que funcionó en las dos últimas etapas pleistocenas de actividad del Campo de Calatrava. 

Volcán de Cabezo del Hierro (38º-58'-10" N / 4º-00'-10" W)  Se trata de un pequeño edificio volcánico formado por piroclastos de caída y un recubrimiento de lavas escoriáceas que colmata el cráter que albergó un lago de lava, y le da el característico perfil de lente, común a un alto número de volcanes en el Campo de Calatrava. En su base afloran piroclastos hidromagmáticos. En sus inmediaciones, en el camino que conecta con Sancho Rey, se encuentran dos pequeños maares de edad pliocena de los que se conservan los rebordes calizos del cráter con marcados procesos de subsidencia.

Maares de Las Casas.- La actividad hidromagmática del campo de volcanes de Palo-Los Corrales, se continúa hacia el norte, dando lugar a los maares que se abren en las inmediaciones de la pedanía de Las Casas. Se trata de las hoyas de Casa de Dientes (39º-00'-40" N / 3º-58' 40" W), Las Casas (39º-01'-40" N / 3º-59'-10" W) y La Celada (39º-01'-00" N / 3º-57'-30" W). Son amplias depresiones explosivas, rodeadas de anillos de tobas bien conservados, en las que aún se producen procesos de encharcamiento que dan lugar a lagunas temporales. La Hoya de La Celada tiene asociado un pequeño afloramiento volcánico formado por Nefelinita olivínica.